Cada vez que buscamos afuera de nosotros, percibiremos dolor.

Si crees,que es alguien, el que te traerá el amor, en algún momento encontrarás desilusión.
Si crees que algo externo a ti te hará sentir más seguro, esto se volverá difícil o inalcanzable.
Si crees que en algo o algún lugar está la abundancia, demorarás y te resultará imposible.
Si crees que en el futuro están las soluciones, éste se volverá temible.

Pero el temor nunca estuvo en el futuro, ni eso que quieres es inalcanzable ni difícil, ni eres ajeno a la abundancia, ni esa persona te ha desilusionado. Estas son las últimas mentiras que te conectan al dolor.

Nuestro camino de regreso a una vida espiritual es el único que tenemos garantizado, es el único seguro. En la perfección del universo, cada vez que elegimos desviarnos de ese rumbo, aparecen todas las señales para hacernos saber que nos demoraremos si seguimos en él. Esas señales son el dolor, la inseguridad, la desilusión y todos los colores posibles del miedo.

Si buscas afuera, siempre encontraras dolor.
Si buscas dentro de ti, es inevitable encontrar el amor, porque eso eres!

Y, si luego de buscar dentro de tí miras afuera, veras reflejado el amor, que es el tuyo.

Agradece cada momento de dolor, cada persona que vino a recordártelo y cada ves que tu cuerpo te avisa que debes regresar al amor, que está en ti. Al hacerlo, volverás a estar en camino.

La vida es simple, si lo elijes así.!
J.B.